Tal vez hayan escuchado sobre las amigas que se vuelven hermanas, pues aquí les tengo una gran demostración, les diré la historia de ellas por separado y luego les mencionaré un poco, como se fueron conociendo, como hicieron esa confianza y ahora se podría decir que una y la otra son complementos.

Comencemos con Yessica Cabezas, sí ya la he nombrado en otra historia pero ella me llama mucho la atención por su forma de ser, es una persona no común y que muchos deberían ser mas como ella; una persona, sincera aunque a veces mentía, amistosa, confiable, no romántica, tímida, feliz y amante del chocolate, sí, así la describiría yo, la conozco desde aproximadamente cinco años, en el primer año de bachiller, ella era la chica que siempre estaba pendiente de sus estudios y de nadie más; sí seguro, la cosa es que en ella siempre veía algo fuera de lo normal, que aparte de ella estar centrada en sus estudios también siempre tenía por delante a Dios, su religión era muy extraña pero poco a poco la fui entendiendo hasta que hoy en día soy Adventista del séptimo día.

En relación con sus amigas siempre la veía en grupos distintos, es normal a esa edad siempre piensas que no hay amigos que todos tus amigos son malos, pero con el tiempo creces y maduras un poco y sabes que no es así, a ella solo le faltó crecer y madurar, ciertamente eso es algo que ella aún no ha hecho, pero cada día le imploro que no lo haga, así es muy divertida.

Un día ella me invita a su iglesia era algo normal ya había asistido a una, pero en ese momento no tenía planeado estar en una congregación o algo por el estilo. Muy lejos de ella, de su amistad y de su entorno existía Ana Teresa, ella es algo contrario a lo que es Yessica hoy en día, Ana siempre estaba amargada y regañando a cualquier persona que se le atravesara. Yessica casi que estaba conversando con las personas que Ana regañaba, no entiendo como se entendían pero lo más importante es, que lo hacían.

Ahora sigamos con Ana, ella la puedo describir como una persona linda, de buen parecer, cabello; negro, liso, largo, en fin para muchos era muy linda yo no opinaba lo mismo, también la describiría como; amable, curiosa, lenta y algo rara, siempre notaba en ella algo muy raro, ellas de alguna forma se conocieron y pudieron estar juntas.

Algo muy particular de ellas era que a cualquiera de las dos le decías que querías salir y ellas te decían que no podían, una vez que ellas te decían salías con ellas y la pasabas demasiado calidad, estar con ellas es al menos una sonrisa robada.

Ella puede que sean mi ejemplo de amistad, ahora no tengo mucho contacto con ellas por qué nos graduamos y una vez que sales del bachiller, debes estar preparado para la universidad y también para hacer tu vida.

No puedo decir que fue una despedida, porque en realidad no lo fue, aún seguimos hablando y conversando como lo hacíamos alguna vez, detrás de los salones del colegio, teníamos la costumbre de en todos los recesos sentarnos allí a comer y hablar un par de tonterías, claro las tonterías las hablaban ellas. Yo solo le pido a Dios que siempre me mantenga a una corta distancia de ellas, para que no me

extrañen, ya que se la pasan todo el tiempo diciéndome eso.

Chicas, También las extraño.